Al fin y a la postre, ha sido ella, ha sido Soraya. Una persona trabajadora y con empuje, tiene preparación, conocimientos, experiencia, capacidad de trabajo e ilusión, esto es lo que Rajoy ha destacado de ella, cierto es que Soraya es de plena confianza de Rajoy, siendo su asesora desde la etapa de Vicepresidente del Gobierno. Es una persona, dedicada al partido y comprometida con el líder, no es precisamente capacidad de trabajo lo que le falta, aunque si algunas dotes en la oratoria.
Tiene ganado el respeto de sus compañeros y adversarios por su preparación, conocimientos, y capacidad de trabajo, pero por desgracia, no es oro todo lo que reluce. Los clásicos del partido, militantes, y hasta un número elevado de dirigentes populares la han aplaudido, pero, no están del todo conformes ante una mujer que ha hecho una carrera a bombo y platillo al lado de Rajoy.
Esto lo achacan al mismo Mariano Rajoy, por haber dado muchas oportunidades para que pueda estar donde está. Esto es que no todos comparten estos halagos hechos por el Presidente del PP.
No le faltan capacidad, ni ganas de trabajo, así se demuestra que mucho tiempo antes de este nombramiento, era conocida en el partido como “la niña de Rajoy”. Apodo crítico y despectivo, con el que los más críticos la etiquetaban.
En los peores tiempos de la pasada legislatura, ella ha sido la que más frecuentemente ha recibido las llamadas del jefe. En los largos avatares de la legislatura, en los duros últimos cuatro años en los que todos no han sabido guardar la lealtad al PP, ella con sus apoyos anímicos en los momentos de mayor dificultad, sus aportaciones y consejos, su visión política, han sido el apoyo al que ha venido aferrándose con fuerza Rajoy, y ahora, se siente especialmente satisfecho de tenerla al frente del grupo parlamentario. Es una decisión de confianza inquebrantable en su propio proyecto, premiándola con la portavocía en el Congreso a quien ha sido la clave de la generación más joven del núcleo del equipo de Rajoy, del PP.
Suerte Soraya, que si estas ahí, con ayudas o si ayudas, no entro en ese debate, tú te lo has ganado ¡enhorabuena!