Leopoldo Calvo Sotelo, es el primer presidente constitucional que muere. Ha fallecido hoy día 3 de Mayo de 2008, a los 82 años de edad.
Calvo Sotelo presidió un mandato breve, marcado por el golpe del 23-F y la profunda crísis de UCD. Sotelo, no fue elegido en las urnas, sustituyó en el cargo al dimitido Adolfo Suárez, necesitó de una segunda votación en el pleno del Congreso para poder ser elegido presidente del Gobierno.
El 20 de febrero de 1981 se celebró su sesión de investidura, que necesitando de dos votaciones. Tras la presentación del programa de Gobierno y el debate posterior, el resultado de la primera votación de Calvo-Sotelo fue el siguiente: 169 votos a favor (UCD, 165; Coalición Democrática, 3; y 1 UPN); 158 en contra, 17 abstenciones y 6 ausencias.
Fue 23 de febrero, cuando durante la segunda votación de la investidura del candidato a presidente, se produjo el famoso intento fallido de golpe de Estado, cuando un grupo de guardias civiles al mando del teniente coronel Antonio Tejero tomaron el Congreso.
Una vez fracasado el intento golpista, la sesión de investidura continuó el 25 de febrero y el candidato obtuvo la mayoría absoluta, por lo que Calvo-Sotelo fue nombrado presidente del Gobierno.
Algunos de los acontecimientos más destacados en su mandato se produjo el ingreso de España en la OTAN, en mayo de 1982. Las luchas intestinas en la UCD provocó la inestabilidad en su gobierno, que a finales de agosto de 1982 se disolvió.
A finales de octubre se celebraron las elecciones generales que dieron la victoria por mayoría absoluta al Partido Socialista fue la fuerte derrota de la UCD. Poco después, Calvo Sotelo, habiendo renovado su escaño de diputado por Madrid, cedió la jefatura del gobierno a Felipe González (principios de diciembre de 1982). En el año 1984 fue miembro de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, y en 1986 miembro Parlamento Europeo, como eurodiputado, donde permaneció hasta 1987. Entonces se retiró de la política activa, pero participando en ella a través de conferencias, artículos o entrevistas, en debates sociales, políticos...
Calvo Sotelo presidió un mandato breve, marcado por el golpe del 23-F y la profunda crísis de UCD. Sotelo, no fue elegido en las urnas, sustituyó en el cargo al dimitido Adolfo Suárez, necesitó de una segunda votación en el pleno del Congreso para poder ser elegido presidente del Gobierno.
El 20 de febrero de 1981 se celebró su sesión de investidura, que necesitando de dos votaciones. Tras la presentación del programa de Gobierno y el debate posterior, el resultado de la primera votación de Calvo-Sotelo fue el siguiente: 169 votos a favor (UCD, 165; Coalición Democrática, 3; y 1 UPN); 158 en contra, 17 abstenciones y 6 ausencias.
Fue 23 de febrero, cuando durante la segunda votación de la investidura del candidato a presidente, se produjo el famoso intento fallido de golpe de Estado, cuando un grupo de guardias civiles al mando del teniente coronel Antonio Tejero tomaron el Congreso.
Una vez fracasado el intento golpista, la sesión de investidura continuó el 25 de febrero y el candidato obtuvo la mayoría absoluta, por lo que Calvo-Sotelo fue nombrado presidente del Gobierno.
Algunos de los acontecimientos más destacados en su mandato se produjo el ingreso de España en la OTAN, en mayo de 1982. Las luchas intestinas en la UCD provocó la inestabilidad en su gobierno, que a finales de agosto de 1982 se disolvió.
A finales de octubre se celebraron las elecciones generales que dieron la victoria por mayoría absoluta al Partido Socialista fue la fuerte derrota de la UCD. Poco después, Calvo Sotelo, habiendo renovado su escaño de diputado por Madrid, cedió la jefatura del gobierno a Felipe González (principios de diciembre de 1982).
Compartía la opinión del Partido Popular, partido en el que no militó, lo que si hizo, fue pedir el voto para José María Aznar y ofrecer al mismo todo su apoyo.
A pesar del paso del tiempo, y el avance de la democracia en España, en el XXV aniversario de la Constitución, el ex presidente del Gobierno expresó que la Carta Magna española “ha probado su eficacia dándonos un largo período de estabilidad institucional”.
Desde junio de 2002 era marqués de la Ría de Ribadeo, con Grandeza de España. Estaba casado con Pilar Ibáñez-Martín Mellado, hija del que fuera ministro de Educación en la posguerra José Ibáñez-Martín, y tenía ocho hijos: Leopoldo, María del Pilar, Juan Víctor, Pedro José, Víctor María, José María, Andrés y Pablo.
1 comentario:
Tiene su homenaje en mi blog.
Un saludo
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